Es fundamental evitar que el perro coma rápido. Ingerir apresuradamente puede traducirse en muchos problemas para su salud. Incluso en el alimento canino hay posibilidades de que se ahogue al tragar sin masticar.
Si tu mascota se comporta de forma muy ansiosa y se desespera por llegar al plato al momento de comer y no mastica lo suficiente los alimentos, presta atención a estos consejos:
1.- Existen platos de comida especiales para este tipo de problemas. Son conocidos como “platos rompecabezas” y poseen distintas formas que obligan al perro a masticar lo que tiene en la boca mientras descubre la manera de seguir extrayendo el alimento.
2.- Utiliza el plato al revés. La parte inferior del comedero es más pequeña que la superior. Además tiene una forma “extraña” que hará que el animal haga un esfuerzo adicional para encontrar la comida.
3.- Introduce un objeto (como una pelota de tenis por ejemplo) en el centro del plato para que sea más difícil alcanzar la comida.
4.- Darle un juguete con comida. Existen en las tiendas de mascotas unos juguetes especiales que se rellenan con comida. A medida que el perro va mordiendo el objeto el pienso va “cayendo”. Es ideal también para que saque a relucir su instinto de cazador.
5.- Alimenta al perro hambriento con porciones más pequeñas de comida más frecuentemente. Intenta hacerlo tres o cuatro veces por día para prevenir que coma rápido grandes cantidades de comida simultáneamente.
6.- Al igual que ocurre con el exceso de alimento, el exceso de agua en especial después de comer, puede hacer que se sature el estómago generando diferentes molestias, entre otras la regurgitación. Lo mejor es que le sirvas solo un poco, después de cada comida, y que después de beber se la retires durante un par de horas. Luego de haber reposado puedes darle la cantidad de agua normal.
